Me disponía esta mañana a escribir sobre triviales zapatos de niños cuando una amiga publica en su muro Facebook este mensaje: "Felicidades Tqm". El destinatario no es su marido, ni una amiga o ni su prima que, a continuación, también felicita al que llama "angelito". Su hermana mayor continúa y escribe: "¡¡¡¡Muuchiiiisimas felicidades!!! ¿Lo estás celebrando? ¡Seguro que tienes la tarta más grande del mundo y te dejan comer toda la que quieras! Un beso enoorrrmeee... Aquí te echamos muchísimo de menos".
Una amiga interviene. Tenemos un invitado a esta misteriosa fiesta: "Seguro que mi hermano se habrá apuntado a comer ese pedazo de tarta y lo están pasando de miedo". Y, otra prima añade: "¡Feliz cumpleaños, Cuchito! ¡Qué suerte tienes de cumplirlos en el cielo!"
Muchos no entenderán de donde procede la alegría de la familia de Cucho, que se marchó de este mundo hace dos años. Una alegría bien profunda que sólo puede proceder del cielo, donde ahora está su angelito. Emocionada, sólo puedo citarles y admirarles.
Pd. Pablete Ugarte y otro que yo me sé también sehan apuntado a la fiesta de Cucho. Eso lo sé yo.
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