Dicen algunos que educar es enseñar a tu hijo a ser cada día menos dependiente de ti. Seguro que esta definición se queda corta pero no deja de ser cierto que, desde su salida del vientre materno, el bebé va adquiriendo poco a poco las aptitudes necesarias para sobrevivir por sí mismo. Así, sobre los 30 años más o menos en España, el niño logrará independizarse casi completamente de papá y mamá.
La paciencia paterna repite durante meses el ejercicio. Un día el bebé logra tomar el biberón por si solo. Emocionados, los padres piensan: "Ya es mayor". Ha dado el primer paso hacia la independencia.
1 comentario:
Efectivamente Catalina ya es mayor,me da gula la rosca de sus brazos.
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